Las tuberías de cobre tienen sus ventajas. Son muy livianas, tienen un costo razonable y la durabilidad es muy buena. Como es un material bastante flexible permite doblarse lo que nos ahorra la colocación de codos, fuente potencial de perdidas. Existen herramientas especialmente diseñadas para hacer estas curvas y son de fácil empleo.
Cuando queremos cortar un tubo de cobre no hay muchas dificultades. Podemos hacerlo con una sierra común, siempre y cuando lo hagamos con paciencia y sin hacer mucha fuerza para evitar curvar la pieza o aplastarla. El único problema es que nos quede en el corte final una rebarba, pero podemos eliminarla con una lima.
Otra forma de hacerlo es empleando un cortatubos. Es la forma más simple, ya que solo requiere que giremos unas dos o tres veces la herramienta sobre la pieza. Muchas veces los cortatubos vienen con un implemento para eliminar las rebarbas, en caso de que queden. La ventaja principal es que no existe el riesgo de aplastar la pieza, como puede ocurrir con la sierra.
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